Víctor García de la Concha (al centro)
Me parece muy interesante la labor que realiza el
Instituto Cervantes en España y en los países en donde el español no es la
lengua materna ni oficial de sus habitantes. Abrir las puertas de la cultura
hispanoamericana al mundo, sin duda, resulta una tarea encomiable, pues de esa
manera se tienden puentes de comunicación y de paz entre los pueblos.
Desde la semana pasada, el 27 de enero
concretamente, el Instituto Cervantes cuenta con un nuevo director, el filólogo
Víctor García de la Concha, quien de 1998 a principios de 2011 fue director de la Real
Academia Española (RAE). Durante su gestión, declaró en 2010, "América ha sido el gran centro de mi trabajo y de mi ilusión. Al poco de
que Fernando me lo pidiera, en la primera visita que hice al Rey, Su
Majestad me dijo: 'No te voy a pedir más que una cosa: que te dediques a
América. Yo te iré abriendo las puertas'. Y así fue. En estos 12 años
he hecho 47 viajes a América. He tenido la suerte de diseñar esa
política panhispánica y se ha logrado algo que el resto de las lenguas
nos envidian: en Portugal, en Francia".
De manera que a nadie puede extrañar que entre las primeras declaraciones del nuevo director, señale que "el eje del Cervantes será América", en clara
alusión a que las prioridades de su mandato se centrarán tanto en el Cono Sur
como en la creciente población hispana de Estados Unidos.
El ofrecimiento para el cargo
se lo hizo el jueves por la mañana el ministro de Educación, Cultura y
Deporte, José Ignacio Wert, luego de que el premio Nobel de Literatura,
Mario Vargas Llosa, declinara la invitación que le hiciera el presidente del
gobierno español, Mariano Rajoy.
Por diferentes motivos la actuación de la RAE, que actualmente cosecha mucho de lo sembrado durante la gestión del nuevo director del Instituto Cervantes, es cuestionada en múltiples medios, sobre todo por cuidar con más celo sus intereses comerciales que académicos y por la polémica desatada desde el anuncio de la denominada nueva Ortografía del español.
Que el Instituto Cervantes tenga en la mira a América ¿será visto por los americanos como una forma de estrechar lazos de cooperación cultural entre pueblos que comparten el idioma o se trata de neocolonialismo o de un negocio más?
Que el Instituto Cervantes tenga en la mira a América ¿será visto por los americanos como una forma de estrechar lazos de cooperación cultural entre pueblos que comparten el idioma o se trata de neocolonialismo o de un negocio más?
Víctor García de la Concha, revisa uno de los ejemplares de la Nueva Gramática de la Lengua Española
CLAUDIO ÁLVAREZ | 09-12-2010