lunes, 3 de mayo de 2010

Pedro Villar: "Los grandes premios... Para el autor es una puerta para la publicación y si hablamos de poesía es casi la única porque los editores piensan que no es rentable.”

 
Anabel Sáiz Ripoll
   Mundo de Letras
LA POESÍA DE PEDRO VILLAR
por Anabel Sáiz Ripoll
“DONDE HABITA LA LLAMA”
“El poeta recoge las palabras
que tiemblan en las hojas de los árboles”

DATOS BIOGRÁFICOS: REGRESAR AL LUGAR DONDE FUI NIÑO

Pedro Villar Para Pedro Villar la poesía es una parte esencial de su vida, tal como leemos en el siguiente poema de “Luz en el laberinto”: “En el silencio habita / un mundo antiguo, / eco suave y fugaz / del corazón herido”. A continuación trataremos de comentar algunos aspectos de la vida y la obra de este poeta albaceteño, con el fin de aproximarlo aún más a sus lectores y, por supuesto, hacer que se conozca más su obra.

Pedro Villar Sánchez, si señalamos algunos datos biográficos, nace en Almansa (Albacete) en 1960. Su madre, en esa década, trabaja de cortadora de zapatos y su padre de ferroviario, en 1968 por traslado laboral, la familia se desplaza a Villena (Alicante) donde reside en la actualidad. Compagina la escritura con su labor de maestro especialista en Pedagogía Terapéutica. Como escritor cultiva sobre todo la poesía, tanto la dirigida a adultos como la infantil y juvenil. Lleva veintiocho años dedicado a la enseñanza, ha realizado numerosas experiencias en torno al teatro y a la escritura creativa, transmitiendo la poesía a sus alumnos como una de sus pasiones.

Así, enlazando con lo anterior, a la pregunta de si tiene intención de transmitir alguna idea o mensaje con su obra, el poeta responde. “Transmitir ideas siempre me sonó a ideología, me gusta más la palabra sugerir, tiendo a intentar que las palabras lleven el vuelo de la emoción. No tengo unos temas predefinidos. Si escribo para adultos los temas son los que me preocupan o me crean inquietud en ese momento: la soledad del ser humano, la incomunicación o lo intangible. A veces escribo para explicarme qué nos pasa, qué sociedad hemos creado, qué tipos tan raros de seres somos en esta sociedad enferma. Cuando escribo versos para niños y otros seres sensibles y curiosos suelo acercarme a su mundo próximo, los juegos, las canciones o el humor.”

En los distintos centros donde ha trabajado ha organizado actividades de animación a la lectura y escritura, semanas culturales, el periódico escolar y la biblioteca. Dirigió la Revista de Poesía Aljibe, editada en Villena desde 1982 a 1985 y donde publica sus primeros versos. En esa época presenta programas de radio relacionados con la poesía, y con otros miembros de Aljibe organiza recitales por diversas localidades de la provincia. Colabora desde 1985 en la Semana del libro de Villena hasta su desaparición en 1990, allí entra en contacto con autores como Ana María Matute, Joan Manuel Gisbert, Emili Teixidor, María de la Luz Uribe, Miquel Obiol o Carles Cano, y con ilustradores como Emilio Urberuaga, Fernando Krhan o Paco Giménez. En 1988 organiza y presenta un acto de homenaje a Paloma Palao, en 1991 participa en el recital "Poetas almanseños en Albacete" y en 1992 en "Poetas de Almansa en homenaje a Miguel Hernández".

Sus versos figuran en numerosas antologías y revistas, ha publicado seis libros, tres de ellos dirigidos al público infantil. Lleva a cabo una labor de difusión y divulgación de los poemas para los más pequeños a través de recitales, cursos y conferencias sobre la necesidad de la poesía, y elabora reseñas críticas de libros de literatura infantil y juvenil en revistas especializadas. Es colaborador asiduo de Pizca de Papel.

Ha participado como jurado en diversos certámenes entre los que destaca el Premio Hispanoamericano de Poesía para Niños, en su edición 2008, en Ciudad de México. Cuando se le pregunta qué opina de los premios literarios confiesa que son: “Interesantes siempre que la entidad que los convoca realice propuestas serias de difusión y promoción en prensa especializada, bibliotecas o centros educativos con encuentros de los autores con los lectores, con actividades que faciliten el conocimiento del libro y su distribución, etc. Si esto no ocurre, los premios no sirven para nada, se convierten en un mero acto institucional sin trascendencia efectiva en los lectores. Los grandes premios son negocios redondos para las editoriales convocantes. Para el autor es una puerta para la publicación y si hablamos de poesía es casi la única porque los editores piensan que no es rentable.”

Cabe añadir que Pedro Villar mantiene un blog sobre literatura infantil y juvenil que lleva por nombre “Cuaderno de apuntes”.

Ahora bien, estos datos biográficos, objetivos y claros, no nos dirían nada si no fuesen acompañados de una sensibilidad especial de la que hace gala Pedro Villar en todos sus trabajos. Con gran humildad y sensibilidad se retrata en primera persona: “Nací, que ya es bastante, tengo los años que tengo, soy lo que fui, lo que olvido y lo que siento que soy. Mis deseos, vivir lo que he leído, lo que he soñado, lo que he perdido. Mis primeros recuerdos son las canciones de mi madre, los cuentos de mi abuelo Pedro y un caballo de cartón que desapareció de la terraza una noche de lluvia. No soy nube, ni golondrina, ni árbol, pero me hubiera gustado serlo. Amo la lectura y los viajes, sobre todo en tren. Mi pasión por la poesía se debe al impulso de regresar al lugar donde fui niño y recuperar los juegos, los cantos y las palabras escritas en la arena.”

Para leer el estudio completo que en este mes de mayo la especialista en Literatura Infantil y Juvenil, Anabel Sáiz Ripoll, dedicó al poeta y buen amigo Pedro Villar, da clic en la liga de la revista electrónica Arena y Cal.

Desde esta Aldea va un abrazo para Anabel y Pedro, magníficos seres humanos.

4 comentarios:

María García Esperón dijo...

A mí también me hubiera gustado ser nube, árbol o golondrina, como dice Pedro Villar.
Y en esta cariñosa Aldea, es posible serlo.

María Eugenia Mendoza dijo...

Y a mí me gustaría ser poeta como tú y Pedro.
Gracias por tus hermosas letras, que siempre caen tan bien.

Pedro Villar Sánchez dijo...

MIs queridas Marías, un fuerte abrazo desde la emoción y la amistad. De corazón, mil gracias.

María Eugenia Mendoza dijo...

Querido Pedro:
Ha sido un placer descubrir facetas de tu vida y obra por medio del trabajo de otra querida amiga. Que las letras sigan fluyendo para cantarlas y contarlas.
Un cariñoso abrazo.